Quien dijo que la escalada es un deporte individual? Si bien es cierto que si, este deporte se trata siempre de tu desafío personal contigo mismo, con la vía, la roca, el grado y sus límites, pero a su vez hay que considerar que sería difícil intentar una vía sin que nadie te asegure.
Pasada la edad en la que se va a escalar en familia, puede ser una buena idea crearse un grupo de amigos escaladores, iniciar a ir más seguido a los rocódromos, y como se dice, buscar un “socio” de escalada. No estamos hablando de oportunismo: la mayor parte de escaladores están de acuerdo con que entrenar en compañía es mucho mejor, incentiva la constancia y con esa pizca de competitividad nos motiva a dar lo mejor de nosotros mismos en cada sesión.
En el caso de que no fuera suficiente para avalar nuestra teoría, a continuación te mostramos otros siete buenos motivos por los cuales tener un mejor amigo escalador es siempre lo mejor.
Seguro mutuo siempre asegurado
Aunque los rocódromos más a la vanguardia estén equipados con los instrumentos más sofisticados para afrontar situaciones en las que un escalador esté solo, esta posibilidad está fuera del alcance si lo transportamos al ambiente natural de la roca. En base a lo dicho en la introducción, donde expusimos que el primer buen motivo no puede ser otro que el poder compartir jornadas enteras de escalada, sin hablar del “seguro mutuo”. Esto te daría la oportunidad de tener con quien leer la vía, sugerirse diferentes soluciones de los pasos más complicados, y que éste comprenda que los insultos no son dirigidos a él y que tratar de aguantarse es imposible a dieciséis metros de altura, todo esto hará que tus jornadas más frustrantes sean más fáciles de procesar. (Probablemente es el único motivo serio de los siete que te mostraremos)
“Intenta de nuevo, esta vez te irá mejor”
Un amigo escalador sabe escoger las palabras justas para el momento preciso, sobre todo después de tu enésima caída en el crux de la ruta. El sentido del humor es un instinto natural de los escaladores, y de no tenerlo, tu amigo sabe perfectamente que en el siguiente pegue le tocará pasar por las mismas regletas resbalosas y que solo le queda darte ánimos mientras se encuentra asegurándote desde el piso.
Se preocupa por tu recuperación física ofreciéndote una cerveza
Hemos visto algunas veces como la cerveza después de una jornada de escalada puede ser nuestra aleada para la recuperación muscular. Y, si tienes un mejor amigo escalador, será él el que se encargue de tu bienestar “después de haber apretado como se debe” recordándote la importancia de la reintegración energética, en este caso aprovechar para tomarse una cerveza en compañía.
Tendrás mejores videos
Hablemos de nuestro entrenamiento en el rocódromo, o de búlder en roca, porque en vías de roca no es muy habitual hacer esto. Sabemos que ver nuestra forma de escalar en un video nos puede ayudar a hacer un análisis de los movimientos, a corregir los errores y a entender que podemos mejorar. No nos sirve de mucho un video realizado con una perspectiva que haga parecer el muro de búlder alto un metro y medio, o que ponga en primer plano nuestros pies. Un amigo que venga a entrenar con nosotros podría grabarnos siguiendo paso a paso nuestros movimientos cambiando de perspectivas, haciendo un video digno de ser publicado en tus redes sociales.
El doble de las guías por la mitad del precio
Si, como podríamos imaginarnos, compartimos con nuestro “compañero de escalada” jornadas enteras en la roca y tardes de entrenamiento juntos, probablemente vivamos cerca y visitemos las mismas zonas de escalada. Y cuando se acerque la hora de “soñar en grande” y planificar vacaciones o fines de semana para escalar, podemos compartir librerías y buscar en nuestras guías, para tener el doble de posibilidades para escoger.
Juegos de mesa y cromos coleccionables
Es fácil que alguien conozca las reglas de Risk o que sepa jugar Pictionary, pero nada se compara con la alegría de poder cambiar cromos coleccionables del álbum de los escaladores más famosos del mundo o de pasar días lluviosos de invierno haciendo suspensiones en la multipresa y jugar una partida de “El Alpinista”. No hay nada que hacer, entre escaladores nos entendemos mejor.
La mágica escala de descuentos de Oliunìd
Si los últimos puntos nos han llevado a entender la importancia del compartir, queremos concluir mostrándote el enorme beneficio de juntar las necesidades de tus amigos por comprar material de escalada para aprovechar de nuestra escala de descuentos! Mientras más artículos compres, más grande será el descuento que encuentres en el carrito al final de tu compra: un gran beneficio que dura todo el año y que conviene aprovechar!
Foto de portada: Sophi Rutherford, Patagonia.