La escalada tradicional es una de las vertientes más antiguas de la escalada, definida a lo largo de los años por diferentes enfoques, tipos de equipo y normas éticas. En su forma más reciente, es decir, desde la introducción y el uso exclusivo de protecciones móviles, también ha adoptado el nombre de «escalada limpia», precisamente para subrayar el aspecto de «impacto cero» de esta disciplina, que no daña ni deja huellas en la roca.
Aunque existen muchas variaciones, como las rutas que se sitúan a medio camino entre la escalada tradicional y la deportiva, en este artículo nos referimos a la escalada tradicional como un estilo de progresión que utiliza exclusivamente fisureros y friends. En comparación con la escalada deportiva, donde la seguridad del escalador es prioritaria, en la escalada trad existe un espíritu de aventura y desafío mental que últimamente está atrayendo a un nuevo público motivado.
Veamos cómo es un equipo básico para un día de escalada tradicional.

Cuerda
Para las vías de escalada trad, necesitaremos una cuerda simple, es decir, identificada con el símbolo "1" en la etiqueta. El grosor y la longitud son variables y dependerán del tipo de asegurador que vayamos a utilizar y de la longitud de la ruta. Generalmente, una cuerda de sesenta o setenta metros será suficiente para la mayoría de las situaciones, pero es imprescindible consultar los topos antes de elegir la cuerda. Aunque cada ruta tiene sus propias características, recomendamos optar —para la mayoría de las situaciones al aire libre— por una cuerda con tratamiento hidrófugo, más resistente al desgaste, a la abrasión y más duradera.
Si la vía que queremos escalar sigue una fisura que no es lineal, sino que «zigzaguea», puede ser una buena idea usar cuerdas dobles. Esta técnica, que te permite evitar ángulos demasiado agudos y, por lo tanto, reducir el rozamiento de la cuerda, facilita una escalada más fluida y rápida. Por supuesto, la técnica de escalada con cuerdas dobles debe aprenderse y dominarse correctamente, especialmente en vías con «protecciones móviles»; además, el uso de cuerdas con diámetros especialmente finos, como las medias cuerdas, implica también la elección de un dispositivo asegurador adecuado.
Asegurador
Aseguradores tubulares
En la mayoría de las situaciones de escalada tradicional, los aseguradores tubulares son el tipo de dispositivo más utilizado. Son compactos y ligeros, capaces de trabajar con la mayoría de los diámetros de cuerda simple, y facilitan el trabajo cuando es necesario realizar un aseguramiento dinámico. Gracias a su capacidad para suavizar la caída, suelen ser la opción número uno para asegurar en rutas tradicionales, ya que ejercen menos presión sobre las protecciones que un asegurador de frenado asistido. En los últimos años, el asegurador tubular clásico se ha revolucionado con la creación de aseguradores «modo guía», que han ampliado las ventajas de este tipo de dispositivo y se han convertido en indispensables en vías de varios largos.
Aseguradores autofrenantes
Si vamos a escalar una vía de un solo largo que sigue una fisura vertical donde podemos colocar protecciones muy seguras, también podemos utilizar el asegurador de frenado asistido clásico que usamos para otro tipo de vías de un solo largo. Dependerá de nosotros suavizar la caída para no ejercer demasiada fuerza sobre las protecciones colocadas y gestionar el ascenso de nuestro compañero con mayor conciencia. Sea cual sea el dispositivo de aseguramiento que elijamos, siempre debemos comprobar que es compatible con la cuerda y el mosquetón para asegurador.

Arnés
En cuanto al arnés, podemos estar más tranquilos, ya que las normas básicas a tener en cuenta son las mismas que para cualquier otra actividad vertical. Lo primero es decidir si optamos por un arnés con perneras fijas o regulables, según la época del año en la que practiquemos trad. Un arnés con perneras regulables es ideal para actividades en invierno o verano, cuando las condiciones meteorológicas varían, mientras que uno con perneras fijas puede ser suficiente si escalamos siempre en condiciones similares. Lo que puede marcar la diferencia en la escalada tradicional es el número de portamateriales y lazos de servicio: en esta modalidad es esencial organizar el material para encontrarlo y colocarlo de la forma más cómoda y rápida posible. Dado el gran volumen de equipo que llevaremos atado al arnés, un modelo acolchado y cómodo es fundamental.
Pies de gato
Los pies de gato para escalada trad deben ser cómodos y no demasiado agresivos, ya que a menudo tendrás que llevarlos puestos durante mucho tiempo. Al igual que con la cuerda y el asegurador, el tipo de escalada que realices (si es de un solo largo o de varios) puede influir en tu elección. Algunos modelos de zapatillas están diseñados específicamente para escalar fisuras: suelen tener una suela bastante plana y simétrica, y una parte superior con inserciones de tela para proteger los tobillos de la abrasión, o una construcción en el empeine más alta que las zapatillas normales. Los modelos «todoterreno» son un buen punto de partida para quienes se inician en la escalada tradicional; la experiencia y tus preferencias personales guiarán luego tu elección hacia un modelo específico.
Casco
No existen requisitos específicos para la elección de un casco de alpinismo: todas las recomendaciones válidas para elegir un casco de escalada o alpinismo son igualmente válidas para esta disciplina. Sin embargo, dado el mayor riesgo de caída sobre protecciones como friends o fisureros, recomendamos optar por cascos homologados también para impactos laterales y traseros, como los certificados con «Top and Side Protection».
Fisureros
La parte más emblemática del equipo de escalada trad son las protecciones móviles. Los fisureros están disponibles en una gran variedad de tamaños y colores: en general, un juego de 10 o 12 fisureros será suficiente para una primera experiencia en escalada tradicional. Como la iniciación a esta modalidad suele hacerse escalando de segundo, no es necesario empezar con un gran surtido de fisureros, pero sí es importante contar con un buen sacafisureros atado al arnés con un lazo de cordino.
Friends
Los friends son extremadamente sólidos y fiables, y pueden marcar la diferencia en ciertos tipos de fisuras donde las tuercas no ofrecen suficiente seguridad. A diferencia de estas últimas, que funcionan encajándose mecánicamente en la roca, los friends actúan mediante un mecanismo de apertura y cierre de levas que, al expandirse, crean fricción con la roca. Para un primer juego de escalada tradicional, bastarán cuatro o cinco friends de diferentes tamaños.

Mosquetones
Un buen juego de mosquetones no debe faltar en nuestro equipo. Además de los mosquetones ligeros que necesitaremos para organizar el equipo, serán necesarios tres o cuatro mosquetones con anilla, ideales para montar una reunión para rapelar. Por supuesto, también necesitaremos un mosquetón de seguridad compatible con nuestro asegurador.
Cintas
Cintas de longitud variable, por ejemplo, de 60 a 120 cm, nos pueden ayudar en muchas situaciones: imprescindibles para montar descuelgues y maniobras, también pueden ser útiles como protección de última hora si conseguimos pasarlas por grietas o agujeros en la roca.
Cintas express
En comparación con un juego de cintas express para escalada deportiva, un set para escalada trad está compuesto por modelos con cintas más largas y materiales ligeros. Las cintas largas (a partir de 16 cm) permiten adaptarse cuando las protecciones no siguen una línea recta, evitando así ángulos que tensa demasiado la cuerda y que podrían tener consecuencias peligrosas. La ligereza del equipo es crucial debido a la cantidad de material que llevamos colgado del arnés, lo cual puede ralentizar nuestro ascenso.
Magnesio
Un buen suministro de magnesio es siempre el mejor aliado para cualquier escalador que enfrente condiciones de calor o humedad. Ya sea en polvo fino, en trozos o en cubos, ¡asegúrate de llevar siempre la bolsa enganchada al arnés para poder usarla en los momentos más críticos!
Esparadrapo para los dedos
Aunque no siempre es necesario, llevar algo de cinta para proteger las manos y los dedos puede salvarte el día, especialmente cuando escalas fisuras que requieren empotramiento de manos y pies.











